En la vida no se puede estar todo el tiempo disfrutando. Hay que tomarse un tiempo para pensar y enfrentar las cosas negativas que tenemos. El mundo no es perfecto, pero no hay nada que no tenga solución
A veces pienso en cómo me ven los demás cuando me tomo un tiempo para reflexionar, ese momento en el que deseamos estar con nuestra propia compañía, mirando a un punto fijo en el medio de la nada. Todos necesitamos de ese rato para estar con nosotros. Me verán como antisocial, como "ortiva", pero es al menos un ratito que me tomo cada tanto y que considero que todos deberían tomárselo de vez en cuando.
Algunos creen que la vida es corta y por eso hay que disfrutarla todo el tiempo. Eso sería negar una realidad que se ve, que se siente...la presencia de lo negativo. Evadiendo los malos momentos, no se logra que desaparezcan. Ojalá fuera tan fácil. Ese tiempo que deberíamos tomarnos cada tanto nos permite tomar una verdadera noción de nuestra vida y de nuestros problemas. Ahí se nos ocurren las mejores soluciones. Porque ni el mundo ni muchísimo menos los humanos somos perfectos, pero siempre podemos encontrar soluciones.
Ese tiempo en que nos encontramos solamente con nuestra propia compañía, es un momento de goce. Quizá no al estilo general, pero se disfruta. Ya sea para encontrar soluciones, como también para disfrutar de los sentidos potenciados. Si estás en la playa, por ejemplo, sentir el sonido de las olas, los rayos del sol que te tocan y sentir cómo el viento se desliza suavemente por la piel. ¡Quién sabe! Quizá también ayuda a llevarse los problemas.
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